Dejando de lado el actual escándalo político que tenemos entre manos (que le hace la competencia a nada menos que el caso Watergate), el hecho de tener gente que sólo se preocupa en hacerle la vida miserable a otros ya no tiene nombre.
En este país la cultura de la mediocridad es pan nuestro de cada día y a nadie le importa cómo se desarrollaron los acontecimientos, sino quién lo dijo y sólo nos queda "meter candela" o "hacer cargamontón". Eso es lo que hacemos los peruanos... ¡Nos matamos unos a otros! No nos importa nada a la hora de tener que salvar nuestros propios intereses antes que los nacionales. ¿Reflotar a la nación? ¡Qué locura, primero me salvo yo y el resto que se joda!
Estoy harto de ver que la gente que, una vez que llega al pináculo de su carrera, se olvida de donde vino o le importa primero cuanto va a recibir a cuanto puede hacer por sus compatriotas. El aparato estatal está podrido desde la raíz y vamos a seguir fregados por los siglos de los siglos, ya que si hubo personas que nos quisieron impulsar en la dirección correcta, fueron todos exterminados por "no ser del APRA" o "por no pertenecer al grupo X", etc.
Yo sólo les digo una cosa: Sí hay aún gente que cree en este país, ¡LARGUENSE Y BIEN LEJOS POR FAVOR! Miren lo que le pasa a la gente de buena voluntad que quiere a este país. Si quieren hacer algo, haganlo desde afuera.. No se olviden de su nación pero no se queden... La única manera de arreglar todo este desastre es salir, hacer carrera afuera, ser alguien importante y desde el extranjero ayudar a todos los peruanos que, si bien más parecemos un grupo de ovejas descarriadas y tenemos el presidente que nos merecemos por no pensar (porque yo también vote por Alan), con una buena guía y un buen plan trasado por gente PERUANA y QUE VIVA FUERA DE ESTAS FRONTERAS, podemos llegarle a los talones al menos a naciones más civilizadas.
Miguel Grau, que bueno que no vives para ver en que se ha convertido tu amado Perú, por el cual te volaron en mil pedazos y el cual honra tu memoria, vendiendo licitaciones debajo de la mesa, eligiendo ministros diagnosticados como locos y criando a las futuras generaciones con las nuevas leyes dignas del imperio incaico: VENDERÁS PIRATERIA, PEDIRAS COIMAS, NO RESPETARÁS A TUS COMPATRIOTAS Y ROBARÁS A MÁS NO PODER.
¡VIVA EL PERÚ!
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